Dentro de las enfermedades dermatológicas más frecuentes en niños se encuentran los moluscos infecciosos o contagiosos, usualmente vinculados a los ambientes húmedos típicos de vestuarios o piscinas, sitios que los niños suelen frecuentar con regularidad tanto durante el verano como en el invierno. En el artículo de hoy te contamos todo lo que hay que saber sobre esta enfermedad para que estés preparada para identificarla y actuar cuanto antes.
El molusco infeccioso en niños
Como les comentamos al comenzar el artículo el molusco infeccioso es una enfermedad dermatológica bastante frecuente tanto en bebés como en niños y que suele estar relacionada con el contacto con ambientes húmedos. Esta dolencia está provocada por un virus que, si bien no reviste de gravedad alguna ni resulta peligrosa para la salud del pequeño, se contagia con muchísima facilidad.
En cuanto a su manifestación, el molusco infeccioso aparece en forma de protuberancias sobre la piel del pequeño afectado pudiendo confundirse al principio con simples verrugas. Puede que en sus primeras etapas pase completamente desapercibido, pero sin tratamiento el molusco se esparcirá por el cuerpo y se volverá más visible y prominente. La lesión provocada por el virus no pica ni duele, por lo que solo será identificable a través del tacto o la vista.
Además de encontrarse en sitios húmedos como vestuarios o piscinas, lugares que algunos niños frecuentan con regularidad, el molusco infeccioso también puede contagiarse por entrar en contacto con objetos o hasta ropa contaminada por el virus en cuestión.
Prevenir el contagio del molusco infeccioso
Si bien evitar que un niño se contagie con este molusco es bastante complicado, existen ciertas medidas que podemos tomar para tratar de prevenir su aparición. Veamos cuales son:
- Es importante lavarse muy bien las manos e higienizarse bien el cuerpo luego de haber utilizado vestuarios públicos o baños, sobre todo si se trata de recintos con humedad o con piscinas. Por otro lado, en el caso de los niños que practican natación, es imprescindible el uso de alguna protección para los pies como chanclas o escarpines.
- Si el niño va a bañarse en cualquier piscina, ya sea en circunstancia deportiva o no, debe ducharse tanto antes como luego de meterse al agua.
- No se deben compartir objetos personales acuáticos de otros niños ya que pueden estar contaminados.